BRAIN HEALTH AS YOU AGE: A PRACTICAL GUIDE TO MAINTENANCE AND PREVENTION, S. Simmons , W. Mansbach y J. Lyons ,2018
Seguimos!
Hola Persona Humana, hoy vamos a hablar sobre algo tan natural pero a la vez tan desconocido como el envejecimiento. Digo desconocido porque aunque últimamente se ha invertido mucho tiempo y esfuerzo en comprender el cómo y el por qué envejecemos, cada vez surgen más y más aspectos que lo explican y más aspectos por resolver.
La Organización Mundial de la Salud define el envejecimiento como el «proceso fisiológico que comienza en la concepción y ocasiona cambios en las características de las especies durante todo el ciclo de su vida; esos cambios producen una limitación de la adaptabilidad del organismo en relación con el medio. Los ritmos a que estos cambios se producen en los diversos órganos de un mismo individuo o en distintos individuos no son iguales».
Actualmente, después de la mejora de la sanidad pública y del aumento de los medios de las sociedades modernas, el envejecimiento es un fenómeno que tiene enormes consecuencias económicas, sociales y políticas.
¿Por qué envejecemos?
El envejecimiento es un proceso multifactorial. Podemos dividir las causas del envejecimiento en dos: las genéticas y las ambientales. Aunque hay más teorías, aquí presentaremos solo algunas de las más contrastadas:
- Entre las teorías basadas en mecanismos genéticos muchos científicos consideran que las claves del envejecimiento se encuentran en el ADN o en el proceso de la división celular:
- la teoría de Hayflick: las investigaciones han demostrado que la reproducción celular no es infinita, pues sólo pueden sufrir un determinado número de divisiones (límite) que está programado en su bagaje genético.
- la teoría de los telómeros: los telómeros son los extremos de los cromosomas. El problema celular se produce cuando el acortamiento de los telómeros es tal que durante el proceso replicativo estos no pueden preservar el ADN de los cromosomas, produciendo la inconsistencia del material genético.
- la teoría de la apoptosis: la apoptosis es el suicidio celular o muerte celular programada, por el bien común del resto de órganos y funciones. Durante el desarrollo celular hay un equilibrio entre proliferación y apoptosis, sin embargo durante el envejecimiento la apoptosis se intensifica resultando un déficit de células.
- Entre las teorías ambientales, el Dr. Harman desarrolló en 1956 la teoría de los radicales libres o de la peroxidación: los radicales libres formados durante el proceso oxidativo del metabolismo normal reaccionan con los componentes celulares, originando la muerte de células vitales y, finalmente, el envejecimiento y la muerte del organismo. Los radicales libres son muy reactivos y se convirtien en fuente de nuevos radicales, lo que da lugar a una cadena que conduce al consumo de muchas moléculas estables. La idea general de esta teoría es que los antioxidantes celulares no son capaces de detoxificar las especies reactivas de oxígeno que se generan continuamente en la vida.
Nos han convencido que la vejez lleva asociada una inevitable decadencia, degeneración, falta de vitalidad, apatía y consumo de fármacos. Y que tenemos que vestirnos de forma aburrida, llevar pañales, olvidar lo que hemos comido esa misma mañana o estar todo el día mirando la tele. Esto no es así. Nuestra evolución natural es mantener la misma vitalidad durante toda la vida, sin negar una leve bajada en las últimas décadas, pero sin necesidad de enfermedad grave, hasta el día en que contraemos una neumonía o sufrimos una caída grave y en pocos días fallecemos. No tenemos que resignarnos a vivir años y años enclaustrados, sedentarios y aburridos.
¿Cómo se consigue esto?
Hay varias claves:
- mantenerse activo: camina todos los días, a buen ritmo. Es muy importante conservar la movilidad y la autonomía.
- entrenar fuerza: mantén tu musculatura levantando peso y comiendo suficiente proteína.
- comer comida real: elimina azúcares, harinas refinadas, aceites vegetales, y todo tipo de ultraprocesados y refrescos.
- hacer ayuno intermitente: la restricción calórica aumenta la longevidad y favorece la autofagia.
- descansar de forma y las horas adecuadas: lo que te ayudará a respetar los ritmos circadianos, fundamentales para mantener un metabolismo sano.
- seguir aprendiendo toda la vida: para conservar la reserva cognitiva de la que hablamos en este mismo blog
¿Se podrá llegar a tratar el envejecimiento como si fuera una enfermedad? Ya veremos…
Gracias por seguir ahí!